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Esta Mujer Pensó Que Tenía Una Mascota Para Toda La Vida – Lo Que Encontró Después Te Dejará Boquiabierto

EL NEGOCIO DE TODOS

Claro que el Pequeño Black pasaba la mayor parte del tiempo dentro de casa, pero el alto índice de crecimiento estaba haciendo la situación súper difícil para todos. Además, Su Yun tampoco quería que se pasease por su patio trasero, ya que los vecinos empezarían a cuestionar su inusual comportamiento.

Imagina cuántas cabezas se girarían si lo sacaran a pasear. Un perro gigante siempre es un espectáculo público, pero si se añade el hecho de que camine en posición vertical a la ecuación, habría murmullos. ¡El Pequeño Black podría incluso acabar siendo una sensación viral! Su Yun no quería nada de eso, así que tendrían que idear una solución.

¿COMPRAR O ADOPTAR?

Luego de pensarlo mucho, Su Yun sabía que estaba preparada para ampliar su clan familiar. Pero el primer paso era decidir si quería adoptar o comprar su cachorro. Era una de las decisiones mas difíciles que debería tomar y estaba preparada para hacerlo.

Como los cachorros adoptados podrían necesitar más amor y cuidados que los criados, había muchas cosas que considerar. En todo caso, era bueno saber que estaban dando amor a un cachorro que realmente lo necesitaba. Esto, llenaba de alegría el corazón de Su Yun, que podía imaginarse cómo serían sus días con dulces ladridos llenando su casa.

LOS PERROS SON LO MEJOR

Su Yun era sin duda una persona de perros, así que no había dudas al respecto. Si has tenido el privilegio de tener un cachorro, no hace falta que te explique la alegría que te dan. Desde pedir mimos hasta destrozar tus alfombras, estas traviesas criaturas gritan “felicidad”.

Sí, puede que esto último te moleste, pero con sólo mirar su tierna cara, todo queda perdonado. Así se lo imaginaba Su Yun, que no podía esperar a que uno de ellos entrara en su casa. La colmaría de amor y seria un complemento perfecto para la familia.

¡EN SUS MARCAS, LISTOS, YA!

Su Yun investigó varias razas de perros, sus características, cómo cuidarlos y todo lo que había que saber. Ahora que su corazón estaba decidido a tener un nuevo cachorro, no quería dejar ninguna piedra sin remover. Al fin y al cabo, pensaba traer un animal con sus hijos, y siempre es mejor estar preparado.

La lista estaba preparada, incluso antes de que llegara el perro, Su Yun consiguió de todo, desde una bonita placa y un collar para el perro hasta una cama para él. Ahora el afortunado cachorro tenía todo lo que necesitaba para formar parte de la familia de Su Yun.

UNA VIDA SENCILLA PARA GENTE SENCILLA

Aunque Su Yun soñaba con una vida de lujo para su cachorro, tenía una vida bastante sencilla. Al fin y al cabo, Su Yun residía en la ciudad china de Kunming con su familia, y “ajetreo” era la palabra para cada día. La bulliciosa ciudad y las horas de trabajo añadidas para mantenerse a flote económicamente empezaban a pasar factura tanto a Su Yun como a su marido.

Ni que decir tiene que los niños también echaban de menos el tiempo familiar. Parecía que ya era hora de hacer un viaje en familia. A todos les vendría bien un descanso, ¡pero las próximas vacaciones tendrían un giro inesperado!

UN VIAJE PARA RECORDAR

Planeaban y planeaban, pero nada podía preparar a la familia de Su Yun para lo que vendría. En cualquier caso, toda la familia estaba más que emocionada, ya que a diario solo veían nada más que las contaminadas y ajetreadas calles de la ciudad. Un cambio de escenario sería excelente.

De hecho, eso es lo único que querían de este viaje, volver a unirse como familia y regresar recargados con un montón de buenas energias y buenos recuerdos. Sin embargo, eso no es lo único con lo que volvieron. Esta sencilla familia estaba a punto de convertirse en la comidilla de la ciudad, ¡y no tenía ni idea de ello!

DESTINO DESBLOQUEADO

Su Yun y su familia llegaron a su destino sanos y salvos, y los días pasaron de la monótona rutina citadina a horas de aventura. Está claro que a los niños les encantó la libertad de correr y jugar. Su Yun, y su marido, tampoco podían dejar de sonreír de oreja a oreja.

Por si fuera poco, unos días después se encontraron con una adorable camada de cachorros. ¿No es increíble? Lo que no te hemos contado es que el sueño de Su Yun de tener un cachorro no fue una idea en solitario. Tanto su marido como sus hijos estaban de acuerdo, ¡y ver esta camada fue una señal!

UN SUEÑO FAMILIAR

Al igual que Su Yun había soñado con traer un cachorro a casa, a sus hijos también les encantó la idea de tener otro compañero de juegos. Y más, si era peludo. Ahora que habían encontrado esta camada, ¿cómo podría la familia no llevarse uno?

Incluso antes de que esa idea se les pasara por la cabeza, los niños habían establecido un vínculo con los pequeños cachorros. ¿No era esto el destino? Los hijos de Su Yun también eran gentiles, así que los pequeños se encariñaron con ellos al instante. Por supuesto, no podían acoger a toda una camada, y elegir entre estos era algo que les rompía el corazón.

¿CONEXIÓN DEL ALMA?

Aunque su sueño era tener una mascota en su casa, la ajetreada vida en la ciudad hacía que siempre hubiera algo que los distrajera de conseguirlo. Por fin estaban en un descanso, y en ese momento, el súper lindo cachorro era lo único que ocupaba sus mentes.

Su Yun cogió uno, y por alguna razón, sintió que esto era lo que le faltaba a su casa. Más aún, que los otros, este cachorro en particular enamoró a todos en la familia, y simplemente no pudieron resistirse cuando les derritió el corazón. ¿Habrán encontrado por fin al “elegido”?

CONFIAR EN UN EXTRAÑO

Al cabo de un rato, un hombre se acercó y resultó  ser que la camada era suya. ¡Oh, no! Ya habían puesto su corazón en esta preciosidad, pero ¿y si el hombre se negaba a dejárselo?

Por suerte para Su Yun y su familia, pronto se vio que esa persona pretendía vender el cachorro. Según el hombre, se trataba de una rara raza de perro llamada Mastín Tibetano. Esta información, fue suficiente para sellar el trato con Su Yun, ¡ya que siempre había querido tener una raza de perro exótica!

ADVERTENCIAS

¡El hombre incluso advirtió que esta raza en particular crecería hasta 2 pies de altura! Sin embargo, Su Yun y su familia estaban convencidos de que era lo que necesitaban. Además, esta raza era muy difícil de encontrar, por lo que Su Yun no iba a renunciar a esta oportunidad.

La idea de adoptar un perro estaba definitivamente descartada ahora que habían encontrado al indicado. Y no hay que olvidar que un total desconocido transmitió toda esta información. ¿Su Yun y su marido se apresuraron a confiar en él? ¡Sólo el tiempo lo dirá!

CONOCER AL PEQUEÑO BLACK

En cualquier caso, la familia de Su Yun era ahora propietaria de este espectacular Mastín Tibetano y, por una vez, deseaban terminar las vacaciones y llevárselo a casa. ¿Podría haber una mejor forma de volver a casa que con una bola de pelo a cuestas? No lo creemos.

Entre toda la emoción, el clan se dio cuenta de que el pequeño necesitaba un nombre. Y debido a lo adorable que era el nuevo miembro de la familia, decidieron conjuntamente el nombre de Pequeño Black. Su pelaje negro azabache hacía que el nombre encajara como un guante. Sin embargo, ¡lo que no sabían es que pronto se arrepentirían de ese nombre!

UN NUEVO BEBÉ EN CASA

Por fin estaban en casa, y los días empezaron a llenarse de las travesuras de los niños y el Pequeño Black. La casa de Su Yun se llenó de risas y nada podía apagar sus espíritus.

Su vínculo se estrechó tanto que incluso trasladaron al Pequeño Black al interior de la casa, ya que el clima húmedo de la ciudad incomodaba al pequeño cachorro. La cama para perros que compró Su Yun era perfectamente acogedora, y al perrito también parecía gustarle su nuevo lugar en la casa. Sin duda, ¡se trataba de una mascota mimada!

SUSIE

Los perros no suelen ser exigentes con la comida, y cualquiera que tenga un perro puede confirmarlo. Engullen todo lo que se les pone delante, ya sea leche, pan o comida especial para perros.

La familia, pronto se dio cuenta de que éste no era el caso de su querido cachorro. Parecía odiar la comida para perros y frecuentemente la rechazaba. Su Yun probó experimentar con diferentes variaciones de comida, y ¿adivina qué funcionó? ¡Frutas y fideos! Sí, nunca lo habrías adivinado. !Supongo que había que ir a la tienda de frutas!

OOPS, ¡ESO ES MUCHO!

Aunque al Pequeño Black le encantaba y disfrutaba de esta combinación de alimentos al azar, necesitaba cantidades locas para saciar su apetito. Nunca habían visto a un perro comer tanto, pero, de nuevo, nunca habían tenido uno. Tal vez sea un rasgo único de su igualmente único Mastín Tibetano.

Al menos eso es lo que pensaba la familia de Su Yun, y no había otra alternativa que brindarle lo que necesitaba. Sin embargo, mentirían si dijeran que no era un problema; ¡todas sus provisiones de alimentos se agotarían en una semana! ¿No era eso un poco extremo para un cachorro?

ESO NO FUE TODO

Además, el cachorro, que crecía rápidamente, seguía teniendo necesidades alimentarias más acuciantes. En un año, el Pequeño Black ya devoraba dos tinas enteras de fideos y una gran caja de frutas. Su Yun y su marido se quedaron perplejos, ya que era un verdadero reto establecer un presupuesto de comida para la casa. ¡Parecía que su apetito aumentaba cada día!

Pero, la familia haría lo que fuera necesario para mantener a su bola de pelo. De hecho, ¡gastan mucho más dinero en la dieta del Pequeño Black que en la suya! Tal vez habrían optado por ahorrar más dinero si de antemano hubieran sabido los problemas legales que se producirían!

UN GRAN GIGANTE AMISTOSO

El desconocido al que compraron el perro ya les había advertido sobre el ritmo de crecimiento del cachorro. Así que sabían que, al contrario que su nombre, sería un perro bastante grande. Sin embargo, ¡nadie podría haberlos preparado para lo que estaban presenciando en su propia casa!

El Pequeño Black medía ahora un metro, lo que estaba muy lejos de su altura máxima prevista. Era un perrito igualmente corpulento, de 250 libras, lo que hacía que cualquier invitado se intimidara al verlo. Para aumentar la confusión, una mañana, el Pequeño Black hizo algo tan fuera de lo normal ¡que casi hizo que Su Yun sintiera escalofríos!

ESO ES EXTRAÑO

Los perros nunca dejan de calentar nuestros corazones con sus miradas traviesas y sus pequeños trucos. El Pequeño Black ha sido una fuente de alegría para la familia, y lo querían mucho. Pero, poco a poco, se estaba haciendo demasiado grande para la casa. Derribaba jarrones y otras cosas al caminar, y Su Yun se encargaba de reorganizar la casa cada pocos minutos.

Sin embargo, esto no era lo que la asustaba y hacía que la madre de la casa tuviera una sensación de fatalidad. Era la primera vez que Su Yun veía a su cachorro erguido sobre sus patas traseras, y esto la sacudió hasta el fondo.

ALERTA

De repente, Su Yun tuvo un momento de shock y se sintió como si hubiera visto algún otro animal distinto. Ese encuentro en la cocina dio paso a un efecto dominó que la hizo mirar hacia atrás y cuestionarse todo. ¿Podría un perro hacer esto? No parecía algo que pudiera hacer un perro típico.

Ahora, la señora de la casa incluso sentía bastante miedo de su querida mascota. ¿Pero cómo podía hacerlo? Este cachorro era su bebé, y Su Yun luchó con fuerza para mantener la ansiedad a raya. Sólo era eso, ¿no?

AL ACECHO

Por alguna razón, los instintos de madre de Su Yun se impusieron a los de amante de los perros, y empezó a estar hipervigilante con su mascota. Tal vez no fuera nada y estuviera reaccionando con fuerza a una acción puntual, pero Su Yun no quería dejar nada al azar.

¿Y si su simpática bola de pelos era más peligrosa de lo que parecía? Sus hijos podrían estar en peligro. Y como madre, mantener a sus hijos a salvo sería la primera prioridad. Comenzó a observar de cerca a su mascota, ¡y la verdad estaba más cerca de lo que ellos creían!

CAMBIOS

Parecía que cada día había algo nuevo. La familia de Su Yun fue testigo de un lento pero notable cambio tanto en los rasgos físicos como en la actitud de su mascota. Los cambios corporales eran imposibles de ignorar.

Por ejemplo, los dientes de Pequeño Black parecían incluso más grandes que los de perros guardianes más grandes, como los Doberman y los Pitbull. Esto, unido a los frecuentes gruñidos, fue suficiente para que los niños dejaran de acariciar a su perrito. Incluso el marido de Su Yun estaba perplejo y francamente aterrado por lo que estaba pasando. Tal vez el cachorro tenía algún tipo de enfermedad, que lo estaba incomodando.

Y LA COSA EMPEORA

Pensarías que eso es lo suficientemente aterrador: que tu mascota pase de ser un peluche a un perro que gruñe. Pero eso no fue todo. Era cada vez más evidente que el Pequeño Black odiaba caminar a cuatro patas. De vez en cuando, el perro caminaba erguido dentro de la casa.

Lo asombroso era la facilidad con la que lo hacia. Era muy inusual que un perro caminara así, y Su Yun se estaba quedando sin teorías. Créenos cuando decimos que su mente estaba a toda marcha. ¿Qué le pasaba a su mascota? ¿Se estaba perdiendo algo?

EL NEGOCIO DE TODOS

Claro que el Pequeño Black pasaba la mayor parte del tiempo dentro de casa, pero el alto índice de crecimiento estaba haciendo la situación súper difícil para todos. Además, Su Yun tampoco quería que se pasease por su patio trasero, ya que los vecinos empezarían a cuestionar su inusual comportamiento.

Imagina cuántas cabezas se girarían si lo sacaran a pasear. Un perro gigante siempre es un espectáculo público, pero si se añade el hecho de que camine en posición vertical a la ecuación, habría murmullos. ¡El Pequeño Black podría incluso acabar siendo una sensación viral! Su Yun no quería nada de eso, así que tendrían que idear una solución.

UN HOGAR ACOGEDOR

Seguramente, el dueño de la mascota no dejó de leer sobre perros gigantes y formas de hacer más fácil su vida y la del cachorro.

Finalmente, se les ocurrió construir una casa para perros lo suficientemente grande para el can y procurar que esto calmara su ímpetu. Así habría menos aglomeraciones en la casa y podrían aprovechar el espacio después de haber estado apretados durante tanto tiempo debido al voluminoso tamaño que había alcanzado su “ex” pequeña mascota. Aunque sabían que no era una solución permanente, no dejaba de ser un resquicio de esperanza en su oscura nube.

NO HACER BIEN EL TRABAJO

Ahora que estaba en el exterior, el Pequeño Black podía por fin demostrar que era un perro guardián. Su Yun y su marido pensaban que el cambio sería bueno para el perro, ya que atribuían los cambios de comportamiento a que se sentía atrapado en la casa. Tenían los dedos cruzados y esperaban escuchar poderosos ladridos que alejaran a cualquier enemigo de ellos.

Esta expectativa definitivamente no se cumplió, ya que el perrito apenas hizo algo más que el gruñido habitual. Si ser un perro guardián no era también su verdadera naturaleza, ¿qué pretendía ser el Pequeño Black?

UNA REVELACIÓN ESCALOFRIANTE

¿Recuerdas aquel momento en el que un pensamiento aterrador cruzó la mente de Su Yun al ver al Pequeño Black de pie por primera vez? Lo que no revelamos es que ese pensamiento fue una teoría lejana que le heló hasta los huesos. Sin embargo, han pasado demasiadas cosas desde entonces, y ya no podía ignorar su corazonada.

Ya era hora de desvelar la verdad, ¡pues el Pequeño Black ya se alzaba sobre Su Yun y su marido! Como cualquier detective, sabía que el lugar para aclarar sus dudas sería la Internet. Escribió Mastín Tibetano y buscó en páginas de información interminable sobre todo, desde sus características hasta su comportamiento.

TENEMOS UN LOGRO

Buscando en más foros de amantes de las mascotas para obtener más información, Su Yun vio cómo muchos habían aclarado sus dudas publicando sus propias preguntas. Todo lo que tenía que hacer era preguntar a estos desconocidos de Internet, y alguien podría darle una respuesta al desconcertante comportamiento de su perrito.

Era el momento de la verdad y, la preocupada madre de perro, publicó una foto clara de su gigantesco perro. Más pronto que tarde, un veterinario que parecía tener credenciales legítimas respondió a su consulta, ¡pero no era nada de lo que la familia esperaba! Sólo podemos imaginar que Su Yun se quedó atónita ante el mensaje que recibió.

SU YUN NECESITA UN ABRAZO DE OSO

¿Qué crees que habrá revelado el amable veterinario? Llamar a esto una revelación impactante sería un eufemismo, teniendo en cuenta lo cerca que Su Yun y su familia han estado de su supuesto perro.

Espera… ¿”supuesto”? Sí, resultó que el Pequeño Black no era un Mastín Tibetano en absoluto. Sin embargo, el intrigante forastero no iba muy desencaminado con el origen geográfico de la mascota, ¡ya que en realidad era una raza de oso negro del Himalaya! Si saber que has estado viviendo con un oso salvaje mientras lo confundías con un cachorro no te hace girar la cabeza, no sabemos qué lo hará.

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